Morones Prieto Ignacio
Nació en Linares, Nuevo León, el 3 de marzo de 1899. Sus padres fueron Ignacio Morones y Teresa Prieto. Realizó sus primeros estudios en la escuela Mariano Escobedo y en la Escuela Oficial No. 1. En 1912 ingresó al Colegio Civil, donde cursó la preparatoria, y después se mudó a la ciudad de San Luis Potosí; allí realizó estudios profesionales, primero en el Instituto Científico y Literario y luego en la Escuela de Medicina, y obtuvo su título profesional en 1923. Ese mismo año viajó a París, Francia, para estudiar en la Sorbona un posgrado que terminó en 1928.
A su regreso a México, el doctor Morones Prieto volvió a radicar en San Luis Potosí, donde impulsó las campañas contra la viruela, el tifo, el paludismo y el bocio. Impartió, a la vez, las cátedras de patología y clínica quirúrgicas en la Escuela de Medicina, de la que fue luego director. Asimismo, fundó y dirigió el Hospital Escuela de la Universidad Autónoma de San Luis Potosí, convirtiéndose tiempo después en rector de esta institución. De 1946 a 1948, fue llamado por el gobierno federal para ocupar el cargo de subsecretario de Salubridad y Asistencia.
El doctor Morones Prieto asumió la gubernatura del estado de Nuevo León el 4 de octubre de 1949. Emprendió de inmediato una reorganización de las finanzas públicas, a través de la expedición de una ley de ingresos mercantiles que gravaba a los contribuyentes con impuestos que llegaban incluso al doble de los que hasta entonces venían aportando.
En mayo de 1950 el doctor Morones inició una tarea gigantesca: la canalización del río Santa Catarina, cuya rectificación permitió rescatar 850 mil metros cuadrados de terreno. De la superficie ganada, se desatinaron 110 mil metros cuadrados a jardines, 420 mil a avenidas y calles y el resto (320 mil) se vendió a particulares. Para unir las márgenes del río se construyeron cuatro puentes. Asimismo, para ayudar a saciar la sed de los habitantes de Monterrey, se ordenó la construcción de un canal subterráneo en un lugar conocido como La Huasteca, a la entrada del cañón de la Sierra Madre; de esta manera, se captaron las aguas del subsuelo del río Santa Catarina para ser entubadas en gruesos cilindros hacia dos tanques de almacenamiento.
Otras de las obras realizadas durante este sexenio y que merecen ser destacadas fueron la ampliación de la Plaza Zaragoza (al doble de su superficie anterior) y la construcción de la carretera Galeana-San Roberto.
En cuanto a la electrificación, el go-gobierno del doctor Morones Prieto impulsó el establecimiento de dos plantas termoeléctricas, ambas con capacidad de 15 mil kilovatios; la primera comenzó a construirse en junio de 1951, en un lugar conocido como la Hacienda de San Jerónimo, y la segunda fue inaugurada a fines de 1952.
Bajo el mandato del doctor Morones Prieto se instaló, en 1950, el Patronato Universitario, diseñado para proveer de ayuda económica y material a la Universidad de Nuevo León. Ésta se vio beneficiada, además, con parte de los terrenos que se rescataron luego de reencauzar el río Santa Catarina.
En lo que a salubridad respecta, se erradicó de la entidad el paludismo y se prestó particular atención a la población infantil con medidas tales como la instalación de un dispensario en la plazuela Cuauhtémoc.
En otros rubros, el gobernador Morones Prieto benefició a la industria a través de la exención de impuestos y de otros estímulos diversos. Enfrentó, además, algunos conflictos surgidos entre los comerciantes de la entidad y las autoridades federales de comercio, las que impusieron un rígido control de precios a las mercancías; los comerciantes regiomontanos protestaron y el gobernador intervino firmando un pacto con las Cámaras de Comercio para fijar las condiciones de venta de los artículos de primera necesidad.
Por su parte, el Cuerpo Consultivo de Administración del Ejecutivo del Estado y el Consejo Obrero – constituidos en octubre de 1949 y en febrero de 1950, respectivamente – representaron un apoyo constante en la realización de buena parte de las obras que caracterizaron la gestión gubernamental del doctor Morones.
El 1º de diciembre de 1952, el señor Adolfo Ruiz Cortines asumió la presidencia de la República y cuatro días más tarde designó al doctor Morones Prieto como titular de la Secretaría de Salubridad y Asistencia, por lo que éste renunció a su cargo de gobernador de Nuevo León.
Como secretario de la SSA – cargo que desempeñó hasta 1958 – el doctor Morones impulsó una campaña a nivel nacional para la erradicación del paludismo; fue, simultáneamente, presidente de la Comisión Nacional para la Erradicación del Paludismo; aplicó un amplio programa para el bienestar rural, y creó tanto la Dirección General de Rehabilitación como el Centro Médico Nacional.
En 1959 fue nombrado embajador extraordinario de México en Francia, donde permaneció hasta 1965, año en que el presidente Gustavo Díaz Ordaz lo llamó de vuelta al país para fungir como director general del Instituto Mexicano del Seguro Social, cargo que desempeñó hasta 1970.
En 1967 asistió a la XVI Asamblea General de la Asociación Internacional de Seguridad Social y al año siguiente el gobierno de Nicaragua le otorgó la condecoración “Rubén Darío”, con grado de comendador, por la labor que bajo su gestión realizó el IMSS en aquel país.
Posteriormente, el doctor Morones fue representante de México ante el Comité Ejecutivo de la Oficina Sanitaria Panamericana y presidió la VIII Asamblea de la Organización Mundial para la Salud (OMS), organismo dependiente de la ONU.
El doctor Ignacio Morones Prieto escribió varias obras, entre las que destacan: Peritonitis tífica; Etiología de la apendicitis; Divertículos gastrointestinales, y Tesis mexicana de seguridad social. Murió en la Ciudad de México el 30 de octubre de 1974.
Tomado del libro Los gobernantes de Nuevo León: Historia (1579-1989). J. R. Fortson y Cía., S. A. de C.V. 1990.